martes, 13 de mayo de 2008

Opinar con fotos

Ya se habló bastante sobre cómo Clarín pasó de un apoyo y enamoramiento con el gobierno a una "oposición rabiosa", como le gusta decir a Lavagna.
Este cambio de actitud del gran diario argentino está en los enfoques de sus notas, en sus editoriales, y también en sus fotos. Sino miren.



Esta foto de tapa de Clarín del 24 de octubre de 2005 refleja el momento de sintonía entre el multimedio y el gobierno. La foto es impecable, es bella, el fotógrafo encontró el ángulo justo para crear el aura con el sol de la bandera Argentina y del Frente para la Victoria. Es indiscutible que es una gran foto. Por supuesto, la decisión de publicarla en tapa de esa manera va más allá de lo periodístico.


Algo parecido se podría decir de esta foto.

La imagen es de una enorme ternura. Tiene el contrapunto evidente de los dos tractores, y hasta se podría decir una épica importante representada por el nene que levanta la bandera. ¿Quién podría estar en contra de este chiquito?
Y otra vez lo mismo. La foto es muy buena, pero la decisión de publicarla pasa por otro lado.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

El tractor grande parece sacado de la película Robots.

Olvido dijo...

Hoy en día se lee por varios blogs y se rumorea en algúnos medios que casi la totalidad de las fotos que se publican de los Kirchner (aun en los medios opositores) son entregadas por el gobierno ya que cada día es mas complicado el trabajo de los reporteros gráficos. ¿En el 2005 esto no era así?
Ahora sobre la del tractor debo reconocer que tengo la cabeza quemada. Porque lo primero que pensé es "quieren hacernos creer que los HDP del campo quieren aplastar a nuestra niñez" aun sin ser oficialista.
Mis respetos.

Ajenjo dijo...

Si creí que un medio se ubica en la vereda que le genere negocios. Vamos, quienes dirigen clarín, o cualquier otro medio, lo único que quieren es forrarse de guita, y si para conseguirlo tienen que ser oposición, pues bien, serán oposición.
(Ojo, digo, los que manejan los medios, no los reporteros, fotógrafos, redactores. Ellos están atados a decisiones de los estratos superiores, y no les queda otra que aceptar o irse)

slds
A

Aguilucho dijo...

Fito: la verdad es que no sabía que se le estaba haciendo difícil el acceso a los reporteros gráficos. Tengo contacto con varios y ninguno me dijo algo así. Me interesa, pasame los blogs donde hablan del tema así me interiorizo.
Por otra parte, sí es cierto que el cuerpo de fotógrafos de presidencia funciona muy bien y es común ver sus fotos en todos los medios.
Ajenjo: totalmente de acuerdo. Por eso destaqué que ambas fotos son muy buenas, y que los fotógrafos que las hicieron tuvieron buen ojo. El tema es la decisión de publicar esa foto o cualquier otra de las cientas que entrega el fotógrafo, y cómo se la publica.

Olvido dijo...

En su blog Hugo Villalobos comenta y crítica bastante seguido este tema. En el último post fue bastante duro sobre esto y en escritos anteriores también toco el punto.
Le dejo el link.: http://hugovillalobos.blogspot.com/
Recuerdo haber leído algo mas sobre el tema pero no tengo presente donde. Si mi memoria se decide vuelvo y dejo otros aportes sobre el tema.

Mis respetos

Herbie dijo...

Hay un dato saludable en todo esto: que los fotógrafos, los que están en la calle cubriendo las cosas con frío o calor siguen buscando esas imágenes capaces de captar la atención del lector, de generar el debate, la admiración, la bronca o lo que sea. Además de los méritos artísiticos, hay un vuelo que provocan estas fotos que me resultan muy saludables.

Aguilucho dijo...

gracias fito, muy bueno el blog de villalobos.

Arqueros Sin Manos dijo...

Más allá de las decisiones editoriales acerca de qué se publica y qué no, en Clarín muchas (no sé si la mayoría, pero podría ser o, si no, podría ser dentro de poco) de las fotos que se publican --no sólo las del Gobierno-- son entregadas por sus dueños. Esto no es porque a los reporteros gráficos se les haga difícil trabajar en alguna circunstancia --o no sólo por eso-- sino porque sus patrones y sus jefes adscriben a la causa de cuanto menos fotógrafos, mejor.