jueves, 27 de septiembre de 2007

Un prejuicio vale más que mil palabras

La foto sacada en Marruecos por una pareja de turistas españoles se reprodujo en la mayoría de las tapas de los diarios ingleses. La instantánea alimentó las esperanzas de encontrar con vida a la pequeña desaparecida Maddie. Ayer se supo que no, que la niña de la foto se llama Bouchra Benaïssa. Y no es inglesa, es Marroquí.

La fotógrafa aficionada que tomó la foto del error dijo que había hecho una batería de tomas desde un micro, y que, tiempo después -luego de escuchar que Maddie podía estar en Marruecos- entregó a la policía el material donde se veía "a una niña rubia cargada por una mujer de aspecto árabe".

Es cierto, la pequeña marroquí de lejos parece Maddie. No menos cierto es que en las calles de Londres, Madrid o París debe haber cientos de nenas que incluso se parecen más.

Pero la foto no muestra la realidad. La foto muestra una representación de la realidad que se termina de armar según el ojo del que mira. Esa representación, para el ojo prejuicioso, convierte a esa nenita automáticamente en Maddie secuestrada por esos extraños árabes que la arrastraron al corazón del tercer mundo con el propósito de vaya uno a saber qué.

Como en la película Blow-up, los medios se dedicaron obsesivamente a ampliar la foto y sacar conclusiones. Un fotógrafo de France Presse encontró a la familia de la nena, y se terminaron las especulaciones.


Efe

AP / ABDELJALIL BOUNHAR

3 comentarios:

Papipo dijo...

pero esa nena es igualita a los padres.

Herbie dijo...

En Infoabe uno dejó un comentario (notaron que en los comments de Infobae todos firman con 2 nombres y apellido?) en el que exigía que a esa nena se le haga un ADN porque aunque no fuese Maddie, habría que ver en realidad quiénes eran sus padres.

Anónimo dijo...

No lo puse en el post porque se me hacía muy largo, pero el fotógrafo que encontró a la nena les pidió a los padres que les muestren los documentos -para acreditar que es su hija- para una foto.
Vergonzoso.