El fotógrafo de la semana: Philip-Lorca diCorcia

Empezó a sacar fotos a mediados de la década del 70. Se destaca especialmente en la fotografía callejera. Pero a diferencia de otros grandes que lo precededieron -como Walker Evans, Robert Frank, o incluso Cartier-Bresson- Philip-Lorca diCorcia hace un estudiado manejo de la escena, que no tiene que ver con el control de los personajes sino con el de la luz.
Una técnica habitual en él es poner flashes en la calle, logrando un raro efecto con la combinación de luz natural y artificial.
Se lo considera uno de los fotógrafos más influyentes de su generación, y ha expuesto en los principales museos de arte moderno del mundo.
Para el tratamiento de la imagen de diCorcia es cinematográfico. Creo que en algunas fotos puede verse de esa manera, pero me parece que en otras el uso de la luz no está pensando como en cine para imitar la realidad sino todo lo contrario. Busca crear ese extraño clima de ficción en un escenario real.
Como dato adicional, el hombre de la primera foto le hizo un juicio a diCorcia por la utilización de su imagen con fines comerciales. La justicia dictaminó que, dado que la foto fue tomada en la calle y con fines artísticos, no constituía un uso inadecuado de la imagen del denunciante.